Manifestó que el Gobierno debería permitir que foráneos registrados continúen con su proceso de regularización.
El Defensor del Pueblo, Josué Gutiérrez, tachó de “medida extrema” el decreto promulgado por el Ejecutivo que busca la expulsión de extranjeros irregulares en 48 horas.
En consecuencia, solicitó una reunión inmediata con el ministro de Relaciones Exteriores, Javier González-Olaechea, y posteriormente con el ministro del Interior, Vicente Romero, para encontrar una solución que no afecte a los inmigrantes ilegales y de extranjeros que cometan delitos.
De esta manera, Gutiérrez comentó: “Son cientos de miles de extranjeros en nuestro país que están registrados, pero tienen un estatus migratorio irregular que tiene que darse las condiciones de evaluación para que puedan regularizarse. Es una medida extrema porque no responde a un hecho de razonamiento lógico”.
Asimismo, agregó que “si ellos no le dieron las condiciones, ni el plazo perentorio para que puedan regularizar su estatus migratorio, para aprobarse el texto único se demoraron en promedio dos meses, en todo caso esos seis meses no son realmente efectivos”.
Frente a ello, Josué Gutiérrez cargó contra la medida del Ejecutivo, el cual no consideró un “razonamiento lógico”, puesto que no es una solución correcta para expulsar a personas.
“Es verdad que dentro de esos miles que han venido buscando refugio a nuestro país también hay cientos de personas de mal vivir, pero no por eso podemos perjudicar a miles de niños que están en estos momentos estudiando, cuyos padres están aquí con estatus migratorio no regular”, señaló.
Finalmente, el Defensor del Pueblo dijo que el gobierno debería permitir que los extranjeros registrados continúen con su proceso de regularización.