Sostiene que el 80 % de peruanos es informal y “casi subversivo”.
Antauro Humala declaró públicamente que no está resocializado tras cumplir una condena de más de 17 años de prisión por la rebelión armada que encabezó en Andahuaylas en 2005.
En una entrevista reciente con la abogada Rosa María Palacios, Humala manifestó que aceptar su resocialización implicaría renunciar a sus convicciones sobre los expresidentes Alberto Fujimori y Alejandro Toledo, a quienes calificó como “presidelincuentes” y responsables de actos de corrupción.
Humala explicó que resocializarse significaría reconocer un error en su accionar de rebelión, algo que él rechaza por completo.
“Resocializarse para una persona que se ha sublevado como yo contra dos presidentes condenados por corruptos, como Alberto Fujimori y Alejandro Toledo, sería como decir que me equivoqué”, sostuvo Humala.
También cuestionó el estado actual de la democracia peruana, asegurando que el país enfrenta un alto grado de corrupción e informalidad, afectando al 80% de la población.
“El 80% del Perú es informal, ilegal, casi subversivo. Tenemos puro presidentes hace más de 30 años”, subrayó Humala, quien se refirió al sistema político actual como un “Estado putrefacto”. Estas declaraciones causaron controversia, avivando un debate en torno a su postura radical.
Además, Humala afirmó que sus años de encarcelamiento no lo hicieron reconsiderar su postura política ni sus opiniones sobre las autoridades a las que se enfrentó.
Para él, la resocialización es un concepto aplicable solo a aquellos que aceptan el sistema actual y sus valores, los cuales consideran incompatibles con su visión del Perú.
“Si eso se llama resocializarse, me niego a estar resocializado en un Estado que considera corrupto y decadente”, aclaró.
En su discurso, Humala subraya la necesidad de una reforma radical en el gobierno y el sistema judicial, al tiempo que rechaza cualquier intento de reintegrarse a una sociedad que, en sus palabras, “funciona bajo un sistema corrupto”.