El expresidente Alberto Fujimori falleció el pasado miércoles, dejando al país en un profundo luto. A sus 86 años, tras una larga batalla contra un agresivo cáncer en la lengua, el exmandatario dejó un conmovedor último pedido, revelado por personas cercanas a él.
La excongresista Martha Chávez, visiblemente afectada, compartió uno de los momentos más íntimos y emotivos de los últimos días de Fujimori. Según Chávez, la última petición del expresidente no estuvo relacionada con su salud ni con su bienestar personal, sino con un deseo de continuar contribuyendo al país que gobernó por una década.
Un último anhelo: seguir sirviendo a Perú
“Permítanme vivir unos años más para solucionar los problemas del Perú”, fueron las palabras de Fujimori, según recordó Martha Chávez. Pese a su delicado estado de salud, el exmandatario se mantuvo hasta sus últimos días con la firme convicción de que aún podía aportar al desarrollo del país.
En sus momentos finales, Alberto Fujimori pidió a su hija, Keiko Fujimori, y a su equipo médico que le permitieran participar nuevamente en la vida política del Perú. A pesar de las advertencias sobre los riesgos que ello representaba para su estado de salud, el exgobernante insistió en que quería seguir involucrado en los asuntos nacionales.
“Keiko le advirtió todos los riesgos que significaba, pero él lo quiso hacer”, explicó la exparlamentaria Martha Chávez.
El adiós de un líder político
Fujimori pasó sus últimos días bajo cuidados médicos en la casa de su hija Keiko, quien fue la encargada de compartir la triste noticia de su fallecimiento. “Después de una larga batalla contra el cáncer, nuestro padre acaba de partir al encuentro del Señor”, expresó en un mensaje que conmovió a medio país.
El legado de Fujimori, tanto sus logros como las controversias que marcaron su mandato, dejan una huella profunda en la historia del Perú. Su último pedido, cargado de intención política, refleja su compromiso inquebrantable con el país hasta el último momento de su vida.