A medida que se acercan las elecciones generales de 2026, el panorama político peruano se complejiza, revelando alianzas inesperadas, candidaturas que generan controversia y el descontento en algunas agrupaciones. La tónica dominante es la búsqueda de unidad y la redefinición de estrategias, en un escenario donde la colaboración con el gobierno de Dina Boluarte parece ser un estigma para algunas fuerzas políticas.
Fuerza Popular y APP: Los "patitos feos" y el gesto de Keiko
Alianza para el Progreso (APP) y Fuerza Popular (FP), catalogados como los "patitos feos" por su colaboración con el gobierno de Dina Boluarte, buscan reconfigurar su imagen. En el caso del fujimorismo, ha sorprendido el gesto de Keiko Fujimori, quien, según fuentes cercanas, estaría dispuesta a sacrificar su propia candidatura presidencial si ello contribuye a la unidad de una propuesta política más amplia.
Esta apertura se suma al llamado a la unidad de Rafael López Aliaga (Renovación Popular), quien ha extendido una invitación a Carlos Álvarez para colaborar, ofreciéndole incluso el rol de "Zar de la Seguridad" en un eventual gobierno de Renovación Popular.
"Presidenciables" por doquier y el dilema de Carlos Álvarez
La lista de aspirantes a la presidencia sigue creciendo, incluso con figuras que han tenido un breve paso por la gestión pública. Tal es el caso del exministro Mariano González, quien, tras un par de meses en un portafolio, ahora se ufana de ser "precandidato presidencial" por el partido Salvemos al Perú. Sin embargo, su agrupación arrastra problemas internos que ya habrían provocado la salida de figuras como Rosario Sasieta.
Mientras tanto, en la tienda política de Carlos Álvarez, el panorama no es alentador. Allegados al cómico revelan su "hartazgo" con el "doble juego" de Vladimir Meza, líder de País Para Todos y a quien se compara con Vladimir Cerrón. La "falta de confianza" de Álvarez se debería a reuniones clandestinas de Meza con otras agrupaciones como Firulais con Fe, el entorno de ‘Jonis Lescanus’ y el Partido Morado de Mesías Guevara, en una aparente búsqueda de un "plan B".
Crisis y "dueños de partidos": La degradación de la política
La situación en el Partido Progresemos también es caótica. Tras una tensa relación con Hernando de Soto, ahora anuncian alianzas que, según fuentes, se discuten solo entre Paul Jaimes y su familia, y Álvaro Paz de la Barra y su familia, incluyendo a Sofía Franco, ya voceada para la alcaldía de Lima.
Esta dinámica ha generado críticas, incluso en programas de farándula, y ha llevado a sus "más pintorescos personajillos tiktokeros" a "reflexionar su salida". La percepción general es que la política ha alcanzado un bajo nivel, donde el "caudillismo" ha sido reemplazado por "dueños de partidos", como señaló Juan Sheput en Canal N. Esto, según los analistas, ha derivado en "empleados" en lugar de militantes y la eliminación de todo debate político interno.
Partidos "orgánicos" y la esperanza de los "históricos"
A pesar del panorama desolador, algunos partidos "orgánicos" parecen resistir. En el APRA, se estarían cerrando filas en torno a la dupla de Jorge del Castillo y José Luis Delgado, descartando a figuras como Hernán Garrido Lecca y Humberto Abanto, quienes, aunque "doctos", no tienen el mismo arraigo en el aparato y la "familia aprista".
En Acción Popular, la expectativa gira en torno a la decisión de Víctor Andrés García Belaúnde (‘Vitocho’), quien, de postular, sería una figura fuerte. Sus correligionarios rechazan la presencia de Maricarmen Alva en la lista y critican la poca actividad de Alfredo Barnechea. 'Vitocho', al igual que su tío Fernando Belaúnde, es percibido como alguien que recorre el Perú profundo, aunque ya no "en mulo".
El PPC, el "viejo partido del Tucán" Bedoya, también busca redefinir su rumbo. Carlos Neuhaus, actual presidente, ha expresado su disposición a postular. Sin embargo, se les insta a "ponerse las pilas" y generar mayor trascendencia en sus eventos, advirtiendo que "camarón que se duerme se lo lleva la corriente".
Finalmente, en APP, la resignación a ir solos es palpable, conscientes de su etiqueta de "patitos feos" por su alianza con el gobierno. César Acuña habría manifestado su intención de encabezar la lista al Senado "para salvar al partido", aunque muchos consideran que "ya nada lo salva". La carrera electoral recién empieza, y la volatilidad y las sorpresas prometen ser la tónica dominante hasta 2026.