El juez supremo, Juan Carlos Checkley seguirá participando activamente en el proceso penal contra el expresidente Pedro Castillo y la exjefa del Gabinete Ministerial, Betssy Chávez, por el fallido golpe de Estado del 7 de diciembre de 2022.
La Sala Penal Permanente de la Corte Suprema ratificó las resoluciones de Checkley, emitidas el 27 de mayo y el 4 de marzo de este año, en las que rechazó las recusaciones interpuestas por los abogados de Castillo y Chávez, quienes argumentaban una presunta falta de imparcialidad por parte del magistrado.
Los defensores cuestionaron a Checkley debido a su involucramiento en una investigación preliminar relacionada con la exfiscal de la Nación, Patricia Benavides, por presunta organización criminal.
Sostuvieron que el juez, al haberse inhibido en ese caso, también debió apartarse del proceso penal que enfrenta a sus patrocinados. Sin embargo, el tribunal precisó que dicha investigación solo se basa en la declaración del exasesor Jaime Villanueva, la cual carece de sustento material al no contar con testimonios o datos objetivos adicionales que le den consistencia.
El colegiado supremo, presidido por el juez César San Martín, concluyó que la defensa legal de Pedro Castillo y Bettsy Chávez no presentó pruebas suficientes que demuestren un interés indebido por parte del magistrado recusado.
Prisión
Además, la Segunda Fiscalía Suprema Transitoria solicitó 34 años de prisión para Castillo, acusándolo de rebelión, abuso de autoridad y perturbación grave de la tranquilidad pública. También pidió 25 años de cárcel para Betssy Chávez y otros exfuncionarios, implicados como coautores del presunto delito de rebelión.
Este fallo reafirma la continuidad de Checkley en el proceso, desestimando los intentos de recusación y marcando un nuevo capítulo en el juicio por el golpe de Estado, que sigue generando fuertes repercusiones en el escenario político y judicial peruano.