Se le aplicó mismo razonamiento que a Keiko Fujimori, y su abogado perdió los papeles. Vizcarra quiso victimizarse para distraer de sus actos delictivos.
Al parecer, se agotan las tretas de Martín Vizcarra Cornejo para evadir a la justicia. Además de su recurso para anular la convocatoria a juicio oral, el último sábado en la tarde había presentado otro, pero ambos resultaron en una derrota transmitida en vivo, para disgusto del expresidente.
Erwin Siccha, abogado de Vizcarra había señalado que la Resolución 1-2024, del 4 de julio de este año, que convocaba a la sesión de instalación, no había tomado en cuenta varios puntos.
Entre ellos, figuraba que faltaba una audiencia para evaluar el control de acusación. A Vizcarra se le imputa cohecho y colusión por las obras Lomas de Ilo y Hospital de Moquegua.
“Dicho recurso no procede en una audiencia de instalación de juicio oral, la cual resulta inimpugnable”, se le respondió, luego de una deliberación en el Cuarto Juzgado Penal Colegiado Nacional.
Ante esta derrota, la defensa del acusado volvió a la carga, señalando que había un escrito pendiente. Al revisarse la base de datos, se reveló que este había sido ingresado el sábado por la tarde, lo cual fue considerado una maniobra de último momento contra el proceso.
Siccha argumentaba que solo se iniciaba juicio por cohecho, y no por colusión, lo cual iba a perjudicar ilegalmente su trabajo.
Esta posición terminó siendo desbaratada por el fiscal Germán Juárez Atoche, quien llevaba varios minutos tratando de empezar con su exposición. Manifestó que la nulidad se debió solicitar en la investigación preparatoria, cuando ambos cargos se separaron, o en el control de acusación.
“Etapa precluida” —la calificó, recordando que existe un precedente inmediato contra Vizcarra. Este era la decisión de otro juzgado, de no postergar el inicio del juicio a Keiko Fujimori por el caso “Cócteles”. Esto se basaba en la Casación 413-2014.