El gobernador regional de Tacna, Luis Torres Robledo, supervisó hoy los trabajos de construcción de diques en las quebradas del Diablo y Caramolle, como medida preventiva para minimizar el impacto de posibles avenidas por las lluvias.
Preocupación por las lluvias
Las obras se iniciaron el 28 de febrero y se extenderán hasta el 31 de marzo. Se tiene previsto la construcción de un total de 6 diques, utilizando maquinaria pesada del Gobierno Regional como excavadoras, tractores, motoniveladoras y cargadores frontales.
Características de los diques
Los diques 1 y 2, que se encuentran en la quebrada de Caramolle, tienen una base de 30 metros y una altura de entre 15 y 18 metros. Se compactarán y se construirán vertederos en los extremos para controlar el flujo de agua.
Protección con geomembrana
Cada dique estará recubierto con una capa de geotextil, geomembrana, arena y enrocamiento de piedras de 8 pulgadas para evitar la filtración de agua. Actualmente, los trabajos presentan un avance del 30%.
Aprovechamiento del agua
El gerente general del Proyecto Especial de Tacna, Vianey Torres Alférez, mencionó que se está evaluando la posibilidad de derivar el cauce que se forme ante intensas precipitaciones hacia una zona de pampa para su mejor aprovechamiento.
Recordando tragedias pasadas
En el 2019, un huaico producto de las lluvias intensas afectó a los pobladores del distrito de Ciudad Nueva. En el 2020, otro huaico en la quebrada del Diablo dejó tres fallecidos y numerosas viviendas destruidas en el distrito de Alto de la Alianza.
La construcción de estos diques busca proteger a la población de futuros eventos similares y asegurar su bienestar. La participación de la Subgerencia de Estudios del GRT, el Proyecto Especial de Tacna e investigadores de la Universidad Nacional Jorge Basadre Grohmann demuestra el compromiso de las autoridades con la seguridad de la región.
Dato: En el 2019 y 2020, huaicos en las quebradas del Diablo y Caramolle causaron daños y pérdidas humanas.