La ex primera dama llegó al país azteca durante la madrugada de este 21 de diciembre.
El asilo político es un recurso de protección que ofrecen los países a un extranjero que se considere perseguido por delitos de cualquier índole, y por ende su vida, libertad o seguridad se encuentre en peligro. Este es el caso del golpista Pedro Castillo; quien, tras ser detenido por la justicia; saltó la alerta para su buen amigo Andrés Manuel López Obrador (AMLO), quien inmediatamente le brindó la condición de «perseguido político», para él y su familia.
Para muchos peruanos esta decisión es indignante, debido a que la ex primera dama es investigada por el delito de organización criminal. Asimismo, inmediatamente, tras haber sido retiradas sus restricciones, la esposa de Castillo y sus hijos, tomaron el primer avión y fugaron del país. Ahora ya se encuentran en México, donde serán acreedores de muchos beneficios.
Vale mencionar que, la principal condición para acceder a esta protección es que existan temores fundados, en otras palabras, es una facultad única y exclusiva del Ejecutivo del país que otorgará el beneficio.
Sin embargo, según la ‘Ley de refugiados, protección complementaria y asilo político de México‘, se reconocerá como refugiado a las personas que cumplan con al menos uno de los siguientes requisitos: fundados temores de ser perseguido y se encuentre fuera del país de su nacionalidad y no pueda o, a causa de dichos temores, no quiera acogerse a la protección de tal país; huyó de su país de origen, porque su vida, seguridad o libertad han sido amenazadas por violencia generalizada; o debido a circunstancias que hayan surgido en su país de origen durante su estancia en territorio nacional, tenga fundados temores de ser perseguido.
En ese sentido, México se compromete a no devolverlos, no discriminarlos, interés superior del niño, unidad familiar, no sancionarlos por ingreso irregular y confidencialidad.
Beneficios
Asimismo, los derechos, del asilo político, que les serán otorgados a los refugiados son los siguientes: recibir apoyo de las instituciones públicas, en el ejercicio y respeto de sus derechos; recibir servicios de salud; recibir educación y, en su caso, el reconocimiento de sus estudios; ejercer el derecho al trabajo; pudiéndose dedicar a cualquier actividad, siempre que sea lícita; obtener el documento de identidad y viaje expedido por la Secretaría de Relaciones Exteriores; obtener el documento migratorio expedido por la Secretaría, que acredite su condición de estancia como residente permanente.
En otras palabras, la familia directa de Pedro Castillo recibirá una compensación económica que les permitirá vivir con comodidad en México, así como la protección exclusiva del país. Nuevamente, viviendo de los impuestos de otros ciudadanos.